Sí se siente alegría cuando nos encontramos de nuevo con los estudiantes, dispuestos a organizar los diferentes espacios en especial el de las huertas. Pensar en la seguridad alimentaria y nutricional es sembrar semillas para recoger más tarde.
Manos tiernas para sembrar las semillas en la huerta que hay tras la escuela, la unión hace la fuerza, quedo muy bien.
Profesora y estudiantes arreglando la puerta de la huerta donde estan los compos, donde clasificamos basuras y a la vez sacando el abono.
Educar es comprometernos con la niñez para prepararlos en todas las ramas de la educación, sin abandonar el campo, aprovechando los recursos de la vereda como es el abono orgánico.
No se necesita de predios extensos para sembrar en cualquier pucha de tierra podemos disfrutar de legumbres sanas como lo es acá. 
Así como nos preparamos para presentar un evaluación así preparamos el terreno para sembrar la semilla, con niños responsables como éstos.
También pensamos en la portada de la institución el jardín. Espacios agradeables para alcanzar el éxito.
Como hormiguitas desmenuzando el abono que cada estudiante trajo de la casa, gran abono y no cuesta nada lo encontramos en los potreros.
Este es el espacio donde clasificamos las basuras a manera de que no haya contaminación.
Iniciar el año con la presencia de la brigada de salud por parte de Comfama es la mejor de las suerte.
Exámen de salud visual en nuestras aulas de clase.
Un médico atendiendo a la comunidad donde acudieron más de 100 personas.
Servicio de salud oral donde realizaron cepillado y sumistraron implementos.
Que bien porque iniciamos con pie derecho, al atender nuestra población en cuanto a salud, aspecto importante para poder rendir con eficiencia.
Dios quiera que estos programas sean periodicamente para llevar un control de la población y en especial de la niñez de Guacharaquero.VIRGINIA VARGAS H
Docente
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